segunda-feira, 19 de março de 2012

Máquina de espera

  Había llegado el día. Han sido noches sin dormir, días no perdido, pero gastos en pensamientos con destinos, y sueños por lograr. Miles de preguntas pasaban por su cabeza, sin que puediera contestar a ninguna. No, ahora no había más tiempo. Todo estaba perdido, o ganado, no lo sabía. Sus manos temblaban, sus rodillas no podían con el peso de su cuerpo. Que malo estaba, que cara tenía. Como podía soportar tantas emociones al mismo tiempo y, aún así, seguir adelante con todo lo que tenía propuesto. Contó tres veces todo lo que necesitaba llevar, a ver si no se olvidaba nada. No, todo estaba allí. Podía continuar. Agarró la bolsa con sus herramientas y marchó, dejando trás el recuerdo de alguién que había sido un día. Bajó las escaleras, ahora sin preguntas en la cabeza, solo la seguridad de que todo iba a salir perfecto. 
   Llegó al salón donde todo debería suceder. Las herramientas, recogió una a una de la bolsa y las pusó en el rincón, donde nadie las podía ver. El reloj contaba contento cada minuto menos que tenía que esperar para ver el episodio. El corazón se calmaba por el control de su respiración, que se calmaba por el sudor de su cuerpo. Nada calmaba el cerebro. Pensaba, pensaba, y no pensaba nada. Cada sonido una explosión, denunciando cada uno de sus gestos. Todo estaba listo, ahora solo necesitaba esperar. 

domingo, 11 de março de 2012

Para empezar

Esa es la primera vez que expongo al mundo lo que escribo. No sé como seré recibida por los que creen otras cosas de mí. Aqui escribiré mis pensamientos, mis emociones, amores que tengo ganas de vivir, amores que no he podido vivir, historias de mi cabeza y cuentos de niña, conocerán una parte diferente de mí. Horas en portugues, horas en español. Y apesar de muchas veces solo escribir cosas tristes no soy una persona infeliz, al revés, me gusta sonreir y hacer sonreír a la gente, quiero que sigan con la misma imagen que tienen de mí, solo cambiando cuando estén leyendo mis cosas.